Probé 3 apps para aprender idiomas durante 30 días (y esta fue la única que realmente me funcionó)

Nunca fui bueno con los idiomas. En el colegio pasé inglés con lo justo, y cuando traté de aprender francés por mi cuenta, abandoné a la segunda semana. Pero este año me propuse algo diferente: retomar el aprendizaje con el celular como único recurso.

Así que instalé tres de las apps más recomendadas para aprender idiomas: Duolingo, Busuu y LingQ. Me comprometí a usarlas todos los días durante un mes, mínimo 15 minutos por app. Aquí te cuento cómo fue y cuál realmente me ayudó a avanzar.


Semana 1: Duolingo – Mucho verde, poco progreso

Empecé con Duolingo porque todos la conocen. Su interfaz es divertida, las lecciones son cortas, y sientes que estás “jugando”. Pero después de varios días, noté algo: sabía repetir frases, pero no entendía nada si me hablaban rápido.

Sí, es buena para empezar, pero se siente superficial. Además, las notificaciones insistentes me cansaron rápido. Como app para iniciar y ganar confianza, cumple. Pero no fue suficiente para mí.


Semana 2: Busuu – La más “seria”, pero también la más estructurada

La segunda semana me enfoqué en Busuu. Lo primero que noté fue que tiene un plan más académico: unidades temáticas, niveles, y correcciones hechas por hablantes nativos.

Lo que me gustó:

  • Puedes practicar conversación escrita real
  • Hay explicaciones gramaticales
  • Puedes seguir tu nivel de avance real (A1, A2, etc.)

Lo que no me gustó:

  • Requiere conexión constante
  • Algunas funciones útiles están en la versión premium
  • La interfaz no es tan intuitiva

Conclusión parcial: si eres más estructurado y tienes disciplina, Busuu puede funcionarte. Pero no es tan amigable para quienes aprenden por intuición.


Semana 3 y 4: LingQ – Difícil al principio, poderosa al final

LingQ fue la más rara al principio. Te suelta textos y audios completos, y tú eliges qué palabras conoces y cuáles no. Al principio me frustré. No entendía nada. Pero después de unos días, empecé a notar una diferencia:

Aprendía como un niño aprende un idioma: escuchando y leyendo.

Lo que más me impactó fue esto: después de dos semanas usando LingQ, empecé a entender el idioma en contexto, no como listas de vocabulario.

Además:

  • Puedes leer noticias reales, cuentos, diálogos
  • Cada palabra que marcas se guarda automáticamente
  • Hay audios nativos para cada texto

No hay gamificación, y por eso es menos adictiva. Pero es la única que sentí que me estaba enseñando a pensar en otro idioma.


¿Con cuál me quedo?

  • Si quieres divertirte y no frustrarte, empieza por Duolingo
  • Si necesitas estructura y disciplina, Busuu es tu opción
  • Si realmente quieres aprender como aprenden los niños, con contexto y comprensión real, LingQ es la más efectiva (aunque menos “bonita”)

Reflexión final

No hay app perfecta. Pero hay una que funciona para ti, según cómo aprendes, cuánto tiempo tienes y qué esperas lograr.

En mi caso, descubrí que necesitaba menos juegos y más inmersión. Y eso, una app sencilla pero bien pensada, me lo dio sin prometerlo con fuegos artificiales.

Leave a Comment